Pharmamar es una empresa de pequeña capitalización. Tiene un antiviral avalado por órganos y personas independientes de esta empresa, testado in vitro y en casos reales de pacientes contagiados, y con resultados positivos en su ensayo de fase I/II, pese a lo cual entendemos que no está teniendo la difusión y el conocimiento que requiere. Es importante que las agencias oficiales hagan todo lo posible por acortar plazos al máximo posible (garantizando la seguridad, por supuesto) y que entre todos demos a conocer al máximo este antiviral, lo que repercutiría también en facilitar la toma de decisión a aquellas personas que pudieran ser candidatas para la realización de los estudios clínicos que aún restan.
Es de discusión pública que en el sector de las farmacéuticas el posicionamiento de los productos se ve enormemente influenciado por el tamaño y poder de comunicación de la empresa propietaria. Así, incluso los más escépticos con esta empresa, indican que el problema fundamental es que Pharmamar "es una empresa muy pequeña en relación con los grandes del sector de las farmacéuticas, y que esto es un impedimento para sacar adelante un medicamento, independientemente de que sea bueno" (ver artículo de merca2.es 2 ).
En la misma línea, en este otro artículo de invertiryespecular.com 2 se indica que “… si la diferencia a favor del fármaco español es tan enorme, sería ridículo prescribir un fármaco a un paciente cuando hay otro mejor, pero claro aquí los plazos de comercialización son importantes y en el sector biofarma hay mucha mafia y otras malas yerbas que en el campo abundan… Por bueno que sea un medicamento ... el bocado del covid es pantragruélico como para que se dejen escapar el chollo las grandes del sector Gilead, Moderna, Astrazeneca y otros laboratorios de más peso que el español.”
Recientemente, 2 Francia ha condenado a tres grandes farmacéuticas al pago de 444 millones de euros por prácticas contra la competencia. “… las tres compañías pusieron en marcha una serie de acciones aprovechando su posición para mantener el uso y el precio de Lucentis y evitar que Avastin (un medicamento para tratamientos oncológico) recibiera la autorización para comercializarse”
Por tanto, es fundamental dar a conocer al máximo este antiviral y que se pueda confirmar lo antes posible si su enorme potencial podrá servir o no para reducir la crisis sanitaria y económica que tan dramáticamente estamos sufriendo a nivel mundial.
No hay que olvidar que la negativa de Bruselas a que Pharmamar comercializase Aplidín como antitumoral generó un “enorme” stock de Aplidín (en palabras de su presidente, José María Fernández de Sousa), lo que unido a que este fármaco se emplearía en pequeñas dosis para el tratamiento del coronavirus, abriría la puerta a emplear el fármaco de manera masiva e inmediata en pacientes una vez sea aprobado definitivamente.